El presidente Iván Duque encargó en la dirección de Derechos Humanos de la Policía Nacional al coronel en retiro Luis Alfonso Novoa, quien deberá liderar ese componente que hace parte de la transformación de la institución y ajustar sus procedimientos a los estándares internacionales.
El coronel Novoa, como miembro activo, y durante su retiro, ha trabajado y estudiado los derechos humanos y su aplicación en instituciones policiales, y tiene una experiencia de más de 30 años en cargos relacionados, según citó el presidente Duque, durante el anuncio de su nombramiento.
Fue representante Agente Alterno del Ministerio de Relaciones Exteriores en la defensa del Estado colombiano ante instancias del Sistema Interamericano de Derechos Humanos y, antes de este nuevo cargo, había prestado sus servicios a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Colombia.
Durante su carrera policial estuvo en la Inspección General de la Oficina de Derechos Humanos de la Policía y, en 2006, fue nombrado comandante de la institución en Caldas. Hizo parte de dos reformas a la Policía y, además fue consultor del Departamento de Estado de los Estados Unidos.
En 2003, cuando se desempeñaba como director de Derechos Humanos de la Policía, el periódico El Colombiano le otorgó un premio a su labor en sembrar paz. Así mismo, en 2010, fue seleccionado por el Gobierno de Guatemala para colaborar en la ejecución de una reforma policial en ese país, debido a su experiencia en la materia, además por haber hecho parte de procesos similares en Colombia.
Uno de los casos en los que ha estado como Asesor Alterno ante la CIDH es el caso de la periodista Claudia Julieta Duque, perseguida y víctima de amenazas por parte de agentes del DAS. Ella celebró el nombramiento de Novoa, a quien le atribuye haberle salvado la vida en, al menos, tres ocasiones. Aseguró que fue quien la ayudó a que su caso avanzara en el país y quien le mostró su apoyó ante el organismo internacional.
En un texto del Instituto Interamericano de Derechos Humanos, firmado por el coronel Luis Alfonso Novoa, se describe cómo considera que debe darse la intervención de la fuerza pública en contextos de alteración del orden público con apego a los derechos humanos.
“La formación del profesional de policía se transfiere en la prestación de un servicio social comunitario en donde impera el Estado de Derecho, se vele por la vigencia de los derechos humanos y se le garantice al hombre y la mujer el pleno desarrollo de sus potencialidades, la seguridad, la tranquilidad y la convivencia pacífica”, escribió el coronel en retiro en ese texto.
Establece que la actividad policial debe tener “un carácter eminentemente comunitario, preventivo, educativo, ecológico, solidario y de apoyo judicial”. Así mismo, sostiene que el derecho de Policía, que es el eje fundamental de la actividad policial “está constituido por un conjunto de normas de carácter nacional o local que regulan, por una parte, la función del Estado, orientada a asegurar la existencia en el orden interno y a proteger la integridad de las personas en su vida, honra y bienes, y por otra parte, la conducta humana, con el fin de evitar el abuso de la libertad en perjuicio de la colectividad y del ejercicio de los derechos de todos”.
Novoa fue designado por el presidente Iván Duque, quien espera que la dirección de DDHH de la Policía esté a cargo de miembros no activos de la institución. Este eje que hace parte de la transformación, rendirá informes directamente a la dirección de la Policía, y contará con el apoyo del Observatorio de Derechos Humanos que entregará informes semestrales.
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