La reforma eléctrica propuesta por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha dividido las opiniones en el Palacio de San Lázaro, donde los legisladores del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) pretenden aprobar los cambios en la ley, mientras que la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) desea bloquearla. De la disputa, quien podría salir más beneficiado es en realidad el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Carlos Loret de Mola, en su columna del día de hoy para el diario El Universal, predice que el enfrentamiento entre el PAN y Morena podría ser justo lo que el PRI necesita para revivir, después de caer a un debilitado tercer lugar durante las elecciones presidenciales del 2018.
Durante los comicios de este año, según describe el columnista, el partido tricolor logró mantenerse a flote gracias a la alianza que hizo con el Partido Acción Nacional. Sin embargo, también resalta que tras el sexenio de Enrique Peña Nieto, la imagen del PRI quedó profundamente desprestigiada.
Dicha situación se reflejó en un lejano tercer lugar durante las elecciones presidenciales en las que ganó AMLO con un 53.19% de los votos. En segundo lugar quedó el PAN con Ricardo Anaya, que acumuló el 22.27% de las boletas, y después, con apenas un 16.40% el candidato del Revolucionario Institucional, José Antonio Meade.
Pero Loret de Mola recuerda que esta no es la primera ocasión en la que el PRI se encuentra en una posición difícil. Durante el 2000, el partido que estuvo en el poder por décadas tuvo su primera derrota frente a Vicente Fox Quesada del blanquiazul, sin embargo, dos sexenios después, tuvo un retorno a la silla presidencial con Enrique Peña Nieto.
Según el columnista, el Revolucionario Institucional logró remontar debido a que se encontraba en una posición similar a la que se coloca ahora por la nueva reforma eléctrica de López Obrador: tanto el PAN como Morena, están a la caza de los votos del PRI para lograr colocar sus propias agendas políticas.
Durante los sexenios de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón, Loret de Mola describe una situación parecida. En aquellos años, sin embargo, la disputa en las Cámaras de Senadores y Diputados se daban entre el PAN y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) que en ese entonces tenía entre sus filas al ahora presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Carlos Loret de Mola observa el regreso a esa cómoda posición del PRI en la apariencia alegre de Alejandro “Alito” Moreno y su coordinador de bancada en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira. Según describe en su columna, la estrategia de las y los legisladores del partido tricolor será dejar que pase el tiempo para que sus votos sean cada vez más codiciados entre los bandos de Morena y el PAN.
El deseo de la bancada del Movimiento Regeneración Nacional se volvió más evidente, según recupera el columnista, cuando AMLO pidió a las y los miembros del PRI que recordaran la historia de su partido.
“A los priistas, nada más hay que decirles ‘oigan, ¿ya se les olvidó que el presidente Adolfo López Mateos, que era del PRI, nacionalizó la industria eléctrica y por qué lo hizo? Porque había que electrificar al país, las empresas consideraban que no era negocio ir a electrificar a las comunidades, a los pueblos. ¿Qué, los priistas, ya no piensan así? ¿Van a defender a Iberdrola, a las empresas extranjeras?”, fueron las palabras del mandatario durante su conferencia de prensa matutina a finales de la semana pasada.
Loret de Mola interpreta dos mensajes en el discurso del presidente. Por un lado, cree que hay un “coqueteo” por parte del mandatario para que el PRI rompa su alianza con el Acción Nacional y le de su reforma los votos que necesita. Sin embargo, por otro lado, también les recuerda que una de las banderas en el sexenio de AMLO ha sido el combate a la corrupción y que muchos miembros del partido tricolor ya han sido sujetos de investigaciones, por lo que las y los legisladores no quedan exentos de amenazas.
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