Ante la declaratoria de emergencia sanitaria nacional por el coronavirus y la extensión de la Jornada Nacional de Sana Distancia hasta el 30 de abril, el Dr. Óscar Galicia, coordinador del departamento de psicología de la Universidad Iberoamericana, señaló que podrían Incrementar los casos de estrés, ansiedad y depresión, incluso en personas que no sufren de dichos trastornos.
Actualmente, en México se han registrado 1,378 casos confirmados y 37 decesos por coronavirus. En este contexto, las autoridades sanitarias han enviado constantes mensajes de distanciamiento social y aislamiento como parte de las acciones más importantes para evitar la propagación del virus.
Estas medidas implican un cambio en la rutina diaria de los mexicanos, por lo que el investigador de la universidad jesuita recomendó encontrar actividades para realizar durante el confinamiento, pues son fundamentales para la actividad mental.
A través de un comunicado difundido en los portales de la IBERO, Galicia señaló que la situación de saber que existe un virus a fuera y que se es propenso a contraerlo, provoca emociones negativas como el estrés y la ansiedad asociadas a la amenaza, lo cual puede afectar incluso a personas que no sufren de tales trastornos.
“Un incremento de los casos o de los síntomas asociados al trastorno de ansiedad son esperados. Así como la depresión, pues la falta de actividad, de espacios recreativos, de distracciones, llevan a que algunas personas desarrollen síntomas de depresión”, explicó el investigador.
Para mitigar estas emociones, el experto recomendó realizar actividades al interior de los hogares, tener hábitos y horarios establecidos, con el fin de mantenerse ocupado en el día. Para logarlo, recomendó enumerar todas aquellas tareas para las que no se había tenido tiempo, las cuales pueden ir desde temas de limpieza y orden de la casa, hasta las de enfoque más personal como leer, aprender cosas nuevas, tomar cursos en línea, así como pasar más tiempo con la familia.
Además, hacer actividad física diariamente puede ser una acción positiva, indicó Galicia. Esto debido a que el ejercicio genera serotonina y dopamina, las cuales son sustancias fundamentales para disminuir los neurotransmisores asociados a la ansiedad, como es el caso de la adrenalina, la cual genera preocupación e insomnio. En cambio, cuando se lleva a cabo la actividad física, resultan emociones como alegría, tranquilidad y relajación.
Establecer metas y realizar distintas actividades a lo largo del día, pueden ser acciones positivas evitarán la ociosidad, lo que provocaría vivir un confinamiento más trágico, indicó el especialista.
“Los seres humanos necesitamos nuestros espacios y actividades. Si dependemos de personas (nuestra pareja, por ejemplo) que conviven con nosotros para que nos hagan más llevadera la cuarentena estamos promoviendo situaciones de conflicto”, subrayó.
El investigador de la IBERO agregó que las personas que sufren de depresión son un grupo vulnerable ante las circunstancias de emergencia sanitaria y las restricciones que han sido recomendadas para la población, por lo que es posible que sus cuadros se agraven.
Para los colaboradores y estudiantes de la Universidad Iberoamericana se dará atención a quienes se sienten agobiados, con depresión y ansiedad, a través de la Clínica de Bienestar Universitario.
Además la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) brindará el servicio a través del Departamento de psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina. La atención a los pacientes se llevará a cabo por medio de una plataforma de telemedicina y, además, orientará a los universitarios que soliciten acudir a los servicios de psiquiatría del IMSS o de otros centros médicos.
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