Roma, 4 ene (EFE).- El Gobierno italiano estudia ampliar las restricciones impuestas para el periodo navideño hasta el 15 de enero, sin excluir el confinamiento casi total en todo el territorio nacional el próximo fin de semana, ante el empeoramiento de las cifras de covid.
El ejecutivo de Giuseppe Conte se reunirá este unes de nuevo, después de haber mantenido ayer un cónclave con los responsables de las regiones, para fijar la nueva ordenanza para el «periodo puente» entre el 7 de enero -cuando expira el decreto navideño de medidas anti covid- y el 15 de enero.
«Evaluamos la hipótesis de aplicar para el próximo fin de semana las medidas de zona roja para festivos y vísperas de festivos», dijo el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, en referencia al confinamiento y prohibición de desplazamientos excepto en casos de necesidad que ha regido en las principales fechas del periodo festivo.
«Debemos adoptar serias precauciones porque la variante inglesa de covid nos preocupa por la velocidad del contagio», añadió Speranza.
Italia registró las últimas 24 horas 14.245 nuevos contagios por coronavirus, superando los dos millones desde el inicio de la emergencia en febrero, y superó los 75.000 fallecidos totales con los últimos 347.
Lo más preocupante es que vuelven a incrementarse los ingresos hospitalarios y en cuidados intensivos, y que la tasa de positividad en relación a las pruebas de detección realizadas es cercana al 14 %.
Los medios italianos apuntan algunas de las restricciones que podrían prolongarse a partir del 7 de enero, como el bloqueo de los desplazamientos entre las regiones, además de un nuevo confinamiento estricto el fin de semana del 9 y 10 de enero, como ha ocurrido la mayoría de los días de estas fiestas y ocurrirá también el 6 de enero, día de la Epifanía.
Se debate asimismo sobre la reapertura de las escuelas secundarias el 7 de enero (la primaria se da por hecho) y también de actividades de ocio, como cines, teatros, museos, gimnasios y piscinas, que actualmente están cerradas.
En los días laborables en que se aligeran las medidas sigue vigente el toque de queda a las 22.00 horas y el cierre de bares y restaurantes a las 18.00 horas.
Mientras, continúa la polémica por el retraso que de algunas regiones en la campaña de vacunación con los fármacos Pfizer/BioNTech recibidos la semana pasada.
Por ejemplo en el caso de Lombardía, una de las regiones más afectadas por los casos de coronavirus y donde su consejero de Sanidad, Giulio Gallera, ha sido criticado incluso desde su partido, la ultraderechista Liga, por decir que no pensaba suspender las vacaciones de los sanitarios para efectuar las vacunaciones.
100.000 VACUNADOS
Según las cifras oficiales, hasta ayer domingo se han superado en Italia los 100.000 vacunados.
El responsable de gestionar la emergencia a nivel nacional, Domenico Arcuri, ha indicado que es fundamental inocular unas 65.000 dosis diarias y el plan es tener vacunada el 50 % de la población antes de finales de septiembre. EFE
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