La policía de la provincia de Buenos Aires arrestó este domingo a un hombre con un kilo de cocaína y medio kilo de marihuana en Boulogne, zona norte del conurbano. Los efectivos siguieron los movimientos del detenido durante varios días hasta que lo aprendieron ingresando en su domicilio. La llamativo es que dentro de la investigación se descubrió que el hombre, que vive en la villa Santa Rita, vendía en la calle sin importarle demasiado la cuarentena obligatoria.
Según las fuentes policiales, el detenido fue identificado como Nahuel Tarraona, conocido como “Polenta”. La investigación policial comenzó el jueves pasado, después de que los agentes recibieran una denuncia anónima. Los detectives policiales lo siguieron durante tres días hasta que hoy por la mañana lo arrestaron en su domicilio, situado en Yerbal al 100, en Santa Rita, en la zona norte del conurbano.
Los investigadores relataron que mientras le siguieron el rastro, descubrieron que “Polenta” bajaba de su casa y caminaba hasta uno de los pasillos en la villa Santa Rita. Allí, el detenido se paraba y comenzaba la compra y venta entre medio de los monoblocks.
Durante la mañana de hoy, un grupo de agentes, tras comprobar que Tarraona vendía drogas en Santa Rita, lo siguieron. Se encontraba de acompañante en una motocicleta que lo dejó en la puerta de su casa. Allí, los efectivos lo arrestaron. Según dijeron las fuentes consultadas, una vez dentro del domicilio, los policías comenzaron a revisarla hasta que hallaron un kilo de cocaína y medio kilo de marihuana. Además, a “Polenta” se le secuestró un chaleco antibalas y una caja con cuarenta y dos proyectiles de calibre 9mm.
La causa intervino Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Especializada en Drogas Ilícitas, a cargo del fiscal Matías López Vidal, que mañana hará declarar al detenido en sede judicial.
Aunque este no fue el único caso en cuarentena, el 20 de marzo pasado, la Gendarmería,con base en Orán, realizaba un control para quienes circularan sin una explicación, apostados a la altura de la entrada a la localidad de Hipólito Yrigoyen. Minutos después, los dos ocupantes de la pickup, de nacionalidad argentina, quedarían detenidos a disposición de la Fiscalía Descentralizada de Tartagal, no solo por violar la cuarentena: llevaban 20 kilos y medio de cocaína como carga.
Los gendarmes, con barbijos en la cara, rápidamente notaron algo raro en la pickup: circulaba con sus balizas encendidas, venía desde la ciudad de Pichanal, con rumbo a Yrigoyen. Al verlos, la camioneta acelera. Los gendarmes consultan con el sistema en línea: la patente correspondía a un domicilio y un titular en Chaco.
Así, comienza la persecución. Los gendarmes intentaron frenar la camioneta, sin éxito. La camioneta entra en Yrigoyen, dentro de la localidad, para luego retomar por la ruta 50. Sin embargo, los hombres a bordo entran en pánico.
Sobre el pavimento, los gendarmes comenzaron a notar algo raro: bultos azules, envueltos en cinta. Era la cocaína que llevaban, los oficiales vieron cómo la lanzaban desde la ventanilla. Finalmente, rebasan a la pickup: sus ocupantes ni siquiera frenaron la marcha, la dejaron encendida y salieron corriendo mientras la camioneta rodaba. El rastro de paquetes era de al menos tres kilómetros.
La fiscalía de Tartagal ordenó rápidamente la detención. Horas antes en el barrio San Martín de Córdoba, la Policía de esa provincia detenía al primer acusado de violar la cuarentena, un hombre que se negó a explicar qué hacía caminando de noche cuando estaba vedado más allá de estrictas excepciones: quedó imputado por resistencia a la autoridad y violar el artículo 202 del Código Penal que la Justicia federal aplica para quienes violan el decreto para prevenir la expansión de la pandemia. Poco después, otros dos detenidos caían en la misma ciudad al negarse a un control policial.
En Belgrano, siete hombres fueron arrestados en Roosevelt y Cuba luego de que uno de ellos fuera denunciado por entrar a tiros a un bar de la zona. En Balvanera, la Policía de la Ciudad allanó el hotel Mansión Lirio luego de que un agente de consigna en la cuadra viera una pareja salir del hotel luego de que el presidente Alberto Fernández comunicara el decreto.
Horas después, comenzó una redada que concluyó con trece personas detenidas entre parejas y empleados del lugar: se encontraron drogas sintéticas y pipas varias.
Ambos casos porteños quedaron en manos del Juzgado Federal N°9 de Luís Rodríguez.
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