Liverpool será coronado campeón de Inglaterra por primera vez en 30 años sin patear una pelota este jueves si el Manchester City no logra vencer al Chelsea en Stamford Bridge.
La primera mitad tuvo al cuadro visitante como amo y señor del balón. Con el equipo bien adelantado en el terreno de juego y una presión agresiva, el City impuso su juego rápidamente pero le costó generar situaciones, pese a los ataques de Raheem Sterling por izquierda y de Rihad Mahrez por derecha. La ausencia de un centrodelantero bien marcado le jugó en contra ya que Bernardo Silva no encontró su lugar en el área.
Por su parte, los locales comenzaron complicándose en cada salida hasta que optaron por buscar largo a Willian y a Olivier Giroud, encargado de pivotear y armar juego para que Barkley y Mount puedan unirse a los ataques.
La apertura del marcador llegó a los 36 minutos en un contragolpe individual de Pulisic, quien aprovechó un error de Mendy y Gündogan, que dudaron en el medio y dejaron la pelota suelta. El estadounidense de 21 años tomó el esférico en mitad de cancha, dejó en el camino a sus dos rivales que se habían quedado para defender en un tiro de esquina y al quedar mano a mano abrió el pie derecho para definir al segundo palo y celebrar.
En el complemento, Guardiola mandó a ala cancha a David Silva y a Gabriel Jesus en lugar de Rodrigo y Bernardo Silva. A los 10 minutos celebró el empate cuando Kevin De Bruyne ejecutó un tiro libre espectacular de frente al arco que se clavó de un ángulo.
Tras esa acción, el local salió del fondo y empezó a dejar espacios. El que lo aprovechó fue Sterling, que tras un pase filtrado de Gabriel Jesus, quedó mano a mano con Kepa, pero su definición dio en el palo y ahogó el grito del City. Por el lado del local, Mount perdonó minutos más tarde al aprovechar un mal pase del arquero Ederson en salida, pero su disparo al primer palo se fue apenas afuera.
Tras el parate de dos minutos para que los futbolistas se refresquen, el Chelsea salió con otra actitud. Pulisic armó una jugada bárbara nuevamente en base a su velocidad, al quedar mano a mano dejó en el camino a Ederson y definió con el arco vacío, pero Walker la sacó en la línea.
Minutos más tarde, una gran corrida de Willian por derecha, que dejó en el camino a su marca, derivó en un centro atrás que encontró a Abraham. El joven centrodelantero, que había ingresado por Giroud, definió mordido y Ederson, desde el suelo, evitó el tanto, pero el británico capturó el revote y empujó la pelota con ímpetu. El esférico fue rechazo nuevamente en la línea pero el VAR advirtió que Fernandinho la había despejado con un manotazo. Por eso el árbitro se rectificó marcó penal, expulsó al brasileño del City y Willian estableció el 2-1 desde los 12 pasos.
Para este duelo, Pep Guardiola, anunció que rota a sus jugadores para dar prioridad a la Copa de Inglaterra, en la que el domingo su equipo juega ante el Newcastle. ”No podemos negar que nuestra mirada está puesta en el partido de Newcastle (cuartos de final). Es una final para nosotros”, señaló en conferencia de prensa.
A 20 puntos del Liverpool, el equipo de celeste necesita un milagro para ganar la Premier League, sólo lo hará si gana todos sus compromisos y el puntero cae en todos sus duelos. Por eso el entrenador español parece entregado al destino.
El City se ha mostrado impresionante desde la reanudación, con victorias contundentes ante Arsenal (3-0) y Burnley (5-0). ”Pero el equipo no está preparado físicamente para jugar 90 minutos cada tres días. No ocurrirá”, señaló Guardiola, haciendo referencia a que irá rotando en su once titular.
La lesión de Sergio Agüero, operado de la rodilla izquierda este miércoles en Barcelona, fue un aviso importante. El argentino puede que no vuelva a jugar en las competiciones nacionales este curso, pero llegaría para la Champions en agosto.
Por su parte, Chelsea encara con optimismo el partido de la trigésimo primera jornada para consolidar una racha ganadora después de vencer en los dos últimos encuentros de la competición contra Aston Villa fuera de casa (2-1) y contra Everton como local (4-0). Desde el comienzo de la temporada, los locales han ganado en 15 de los 30 partidos disputados hasta la fecha, con una racha de 53 tantos a favor y 40 en contra.
En referencia a los resultados como local, los conducidos por Frank Lampard han conseguido unas estadísticas de siete victorias, cinco derrotas y tres empates en 15 partidos jugados en su campo. En el papel de visitante, Manchester City tiene un balance de nueve victorias, cinco derrotas y un empate en 15 partidos jugados, por lo que es un equipo que suele conseguir puntos a domicilio.
A su vez, los hombres de Jurgen Klopp llegaron al borde de un esperado título de la Premier League con estilo al derrotar a Crystal Palace 4-0 en su regreso a Anfield el miércoles. Liverpool tiene una ventaja de 23 puntos sobre el campeón defensor City, que tiene ocho juegos para jugar, lo que significa que su 19º título en inglés, y su primera corona de la Premier League, es solo cuestión de tiempo.
La larga espera de los campeones europeos para regresar a la cumbre del fútbol inglés se ha extendido por tres meses debido al cierre sin precedentes del coronavirus. Los temores de que una temporada potencialmente récord podría declararse nula y sin efecto fueron descartados rápidamente, pero el regreso de la Premier League ha ofrecido a los Rojos la oportunidad de sellar el título en el campo en lugar de en una fórmula de puntos por juego.
Si el City logra mantener viva la carrera por el título en Chelsea, un punto sería lo suficientemente bueno para que Liverpool gane la liga cuando viajen a Manchester en un choque entre los dos mejores el 2 de julio.
TV: ESPN2
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Con información de AFP
