Samuel García, candidato por Movimiento Ciudadano (MC) a la gubernatura de Nuevo León, se manifestó en contra de que se vacunen de manera prioritaria contra el COVID-19 a los denominados “siervos de la nación” por encima de los miembros del personal médico de México.
El senador con licencia ya había criticado con anterioridad la estrategia federal de combate al nuevo coronavirus, mismo que llegó a México en febrero del año pasado y ha dejado más de 130,000 muertos; no obstante, ahora se dirigió a la jornada nacional de vacunación, la cual se proyecta terminará en marzo del 2022.
La tarde de este lunes, García Sepúlveda, a través de redes sociales, escribió que el personal que se encuentra en la primera línea de combate al SARS-CoV-2 es el que se debe de priorizar para la campaña nacional de inmunización.
“Un médico no merece hacer fila mientras vacunan contra Covid a un ‘Siervo de la Nación’. Un médico no merece hacer fila mientras vacunan contra Covid a un ‘Siervo de la Nación’”, publicó el egresado del Tec de Monterrey en su cuenta oficial de Twitter.
A pesar de que el político realizó una crítica seria, algunos usuarios de esta red social aprovecharon la oportunidad para burlarse de él. Ya que recientemente había protagonizado incidentes bochornosos por declaraciones que había hecho en lo relacionado a la capacidad adquisitiva de salarios entre 40,000 y 50,000 pesos; así como su perspectiva del trabajo ejercido en la zona sur del país.
Esto por la iniciativa del gobierno federal de inocular al personal encargado de realizar los censos del Bienestar, cuya finalidad es establecer el padrón de los derechohabientes a los programas sociales del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con la estrategia federal, primero se vacunarían al personal del sector salud que estuviera en la primera fila de combate contra la nueva cepa de coronavirus. Esto quiere decir que no sólo iban a ser las y los médicos, sino que también se agregarían a las y los camilleros, las y los enfermeros, personal administrativo y de limpieza; sin embargo, la inclusión de los más de 18,000 “siervos”, acaparó la óptica de toda la oposición de la 4T.
De tal modo que no sólo Samuel García se manifestó en contra, también Marko Cortés, presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), profirió contra lo dispuesto por el jefe del ejecutivo federal, pues esta decisión le parece que tiene fines electorales.
“Celebramos que el INE (Instituto Nacional Electoral) empiece a limitar ese abuso por parte del presidente, que ha dedicado horas para golpear sin sustento a la oposición, que abusa al promover a su partido. Ahora pedimos que además de cuidar la boca al presidente, se les cuiden las manos a los mal llamados Siervos de la Nación”, expresó Cortés.
Cortés añadió que hay una “danza de cifras alegres”, ya que el gobierno habla de millones y millones de vacunas, pero no se han recibido más de 500,000 dosis, las cuales solo alcanzan para 250,000 personas en un país de 120 millones de habitantes, señalando que al ritmo que llevan tardarían años en vacunar a toda la población.
“Hay una evidente manipulación de las cifras. Están haciendo una campaña nacional de vacunación sin vacunas, y al mismo tiempo, una campaña electoral a través de los mal llamados Siervos de la Nación”, argumentó Cortés.
Al respecto, AMLO defendió esta medida pues, de acuerdo con él, los “servidores de la nación”, así como otros servidores públicos, son parte de las brigadas de vacunación, motivo por el cual deben estar protegidos del COVID-19.
“Sí, son cuatro elementos de las Fuerzas Armadas, cuatro promotores, entre ellos dos servidores de la nación, dos promotores de otras dependencias, son ocho, y dos del sector salud, los que vacunan”, expuso el presidente de México en conferencia de prensa.
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