Por Joan Faus y Guillermo Martinez
BARCELONA, 14 feb (Reuters) – Los votantes catalanes acudían el domingo a las urnas para unas elecciones que pondrán a prueba la fuerza del movimiento independentista de la región española, pero en una momento dominado más por la crisis del coronavirus que por el ánimo separatista.
Un goteo constante de votantes con mascarilla se presentaba en los colegios electorales repletos de precauciones contra la pandemia: Toma de temperatura a la llegada, trabajadores electorales con trajes o viseras de protección, entradas y salidas separadas, gel de manos y marcas en el suelo para garantizar el distanciamiento social.
Tanto si ganan las elecciones los partidos separatistas que ahora están en el poder en Cataluña como los socialistas que dirigen el Gobierno central de España, es poco probable que se repita la caótica y efímera declaración de independencia de finales de 2017.
Sin embargo, seguirá siendo una señal importante del atractivo de los separatistas y podría afectar a la trayectoria política del movimiento independentista en los próximos años.
Los sondeos de opinión han apuntado a una baja participación porque los votantes están preocupados por el riesgo de contagio en los colegios electorales.
Cerca de 300.000 personas han solicitado el voto por correo, una fracción de los 5,5 millones de potenciales votantes, pero aún así un aumento del 350% respecto de los que lo solicitaron en 2017.
Los últimos sondeos de opinión dan una ligera ventaja a los socialistas -que se oponen a la independencia pero están a favor del diálogo-, pero necesitarían el apoyo de otros partidos para formar el primer gobierno regional contrario a la independencia en nueve años.
Aun si los separatistas consiguen mantener el control, no parece probable una nueva declaración de independencia, ya que el movimiento está dividido entre planteamientos moderados y de confrontación y sus principales líderes están encarcelados o huyeron de España tras los sucesos de 2017.
Los colegios electorales comenzaron a abrir a las 09.00 de la mañana y las autoridades catalanas confirmaron que el 100% de los colegios electorales trabajaban sin problemas a las 11.00 de la mañana.
Las personas con COVID-19 confirmado o sospechoso votarán durante una franja horaria específica más tarde el domingo.
(Reporte de Joan Faus y Jessica Jones; Reporte adicional de Luis Felipe Castilleja, Jordi Rubio, Nacho Doce y Albert Gea; Editado en español por Javier López de Lérida)