BRUSELAS, 24 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Bélgica, Alexander de Croo, ha anunciado este miércoles un endurecimiento de las restricciones contra el coronavirus por el repunte de contagios y hospitalizaciones que se traducirá en un cierre hasta mediados de abril de las tiendas «no esenciales» y de las escuelas de primaria y secundaria, así como en un refuerzo de los controles para hacer cumplir el teletrabajo obligatorio y garantizar el cierre de su frontera.
De este modo, tras una reunión de cerca de cuatro horas para pactar las nuevas medidas con las autoridades regionales y municipales, De Croo ha defendido que han optado por «un dolor de corta duración» para tratar de contener el virus y poder relajar de nuevo las restricciones en la educación a partir del 19 de abril, fecha que marca el final de las dos semanas de vacaciones escolares de primavera.
El resto de medidas que afectan al cierre de los comercios no esenciales y de los sectores «de contacto» como las peluquerías o centros de estética se aplican de momento hasta el 25 de abril. Con todo, los comercios podrán ofrecer un servicio de compra en distancia y recogida en tienda y también podrán recibir clientes con cita previa.
Además se reduce de diez a cuatro el número de personas que pueden reunirse en espacios al aire libre y se mantienen otras restricciones que ya imponen las autoridades desde hace meses, como limitar a una única persona el número de invitados en un hogar y el toque de queda que entra en vigor a partir de las 22:00 horas.
Las nuevas restricciones se suman también al teletrabajo obligatorio que se aplica en las empresas belgas desde octubre y al cierre de la frontera interior que impide salir o entrar de Bélgica si no es con una declaración jurada que indique la razón del viaje es uno de los supuestos previstos, como por ejemplo reagrupamiento familiar.
En este sentido, De Croo ha anunciado controles más severos para garantizar que no hay desplazamientos a países vecinos durante las semanas de vacaciones escolares y también para asegurar que se cumple el teletrabajo obligatorio siempre que sea posible, con posibles sanciones para las empresas que no cumplan con estas condiciones.
En la presentación de las nuevas medidas, el primer ministro ha querido insistir en que el objetivo es que con este parón de cuatro semanas se pueda contener suficientemente el avance del coronavirus en el país y poder confirmar tras ese periodo que será posible cumplir el anuncio de reapertura de bares y restaurantes –cerrados desde octubre– a partir del 1 de mayo.
Según el último balance de las autoridades sanitarias belgas, el número de ingresos hospitalarios vinculados a la Covid-19 se sitúa en 215,3 al día en la última semana, lo que eleva a más de 2.400 pacientes hospitalizados, de los que 631 permanecen en cuidados intensivos. También el número de fallecidos ha subido un 3,5%, con 25,3 decesos diarios durante los últimos siete días.
