Más de 700 personas fueron detenidas por las fuerzas federales en todo el país, y otras 500 fueron aprehendidas por personal de las policías provinciales en el marco de los operativos de control realizados en el segundo día de aislamiento social obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional para contener el coronavirus COVID-19. El operativo incluyó el secuestro de vehículos de aquellos que no podían justificar por qué se estaban movilizando.
Según informó oficialmente el Ministerio de Seguridad, la Policía Federal Argentina detuvo a 48 personas, la Gendarmería Nacional a 645; la Policía de Seguridad Aeroportuaria a 29; y la Prefectura Naval a seis. “Tenemos facultad para intervenir con todas las fuerzas nacionales y hacer cumplir la cuarentena”, explicó la ministra de Seguridad de la Nacion, Sabina Frederic.
La Policía de la Ciudad intervino en 39 casos de personas que violaron el aislamiento obligatorio, 15 de las cuales quedaron detenidas y otras 24 fueron llevadas con custodia hasta su domicilio para que hagan la cuarentena.
Segun pudo saber Infobae, entre esos casos estaba el de un piloto de avión fue detenido cuando fue a comprar a un supermercado de la calle Dorrego, en Palermo. También fue arrestada una vecina. ¿Por qué? Los dos estaban recién llegados de Italia y salieron a buscar provisiones. Otro caso que llamó la atención a los investigadores fue el de un paciente internado con coronavirus en el sanatorio porteño que recibía las visitas de su esposa que iba para llevarla la vianda. Los dos habían llegado juntos de viaje hace seis días, y la mujer debería hacer cuarentena porque también estaba sospechada de ser portadora.
A esos 700 casos que reportó el Ministerio de Seguridad de la Nación, hay que sumarle los detenidos en el resto de las jurisdicciones provinciales, que se estimaba en unos 500, según contablizó la agencia Télam.
Los delitos que se imputan son los delitos previstos en los artículos 205 y 239 del Código Penal. El artículo 205 dice que “será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia». El 239 que “será reprimido con prisión de quince días a un año, el que resistiere o desobedeciere a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones o a la persona que le prestare asistencia a requerimiento de aquél o en virtud de una obligación legal».
Según indicaron a Infobae fuentes judiciales, la mayoría de los imputados (salvo que mediara un nuevo delito violento) eran llevados a cumplir detención en su casa. Y está previsto que sean indagados cuando finalice la cuarentena obligatoria y/o estén en condiciones de salud óptimo para poder llevar adelante su declaración.
Tal como informó ayer este medio, el juez Luis Rodríguez, encargado de intervenir en todas las denuncias que ingresen por las fuerzas de seguridad hasta el 31 de marzo, le escribió en la noche del viernes una carta a la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic; y a su par de la ciudad, Diego Santilli, para hablar de la “honda preocupación” por las más de 200 denuncias que recibió en un solo día por la violación de la cuarententa y rogó por la implementación de medidas más estrictas.
“Le imploro incremente las estrategias que tengan a su alcance y haya adoptado para tratar de controlar la circulación y el tráfico este día que culmina pues el resultado constatado arroja un panorama que cuanto menos desde la humilde visión que le transmito nos coloca en una situación en la que difícilmente podemos evitar las consecuencias que aquel decreto se encargó de señalar”, escribió el juez.
Hoy se vio a la ministra encabezando algunos de los operativos que se hicieron en rutas llevando adelante los controles más severos, pidiendo DNI a los conductos y detalles sobre por qué estaban circulando en medio de la pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud, cuando se el jueves a la noche se dictó un decreto que imponía el aislamiento obligatorio, con algunas excepciones para poder circular.