Tras el anuncio de la Fiscalía General de la República (FGR) sobre no ejercer acción penal en contra del ex secretario Salvador Cienfuegos Zepeda, se generó fuerte controversia en México. Entre quienes alzaron la voz por el hecho estuvo la periodista Denise Dresser quien aseguró que las Fuerzas Armadas operaban sin control en el país.
“La exoneración de Salvador Cienfuegos demuestra que las fuerzas armadas son intocables”, comenzó a criticar la comunicadora en su cuenta de Twitter. Agregó que este tipo de funcionarios actúan constantemente por encima de la ley y son quienes realmente dirigen el país.
Son los verdaderos intocables, seguirán fuera del escrutinio democrático, son quienes en realidad gobiernan y se han convertido en la nueva mafia en el poder.
En otro mensaje, Dresser compartió la fotografía del ex titular de la Secretaría de la Defensa Nacional durante el sexenio de Enrique Peña Nieto y la acompañó del mensaje “Amlo: ‘No te preocupes Salvador”.
El politólogo Genaro Lozano también se posicionó sobre el tema en redes sociales. Explicó que desde su punto de vista hay dos lados: por uno, “si FGR es autónoma y exoneró a Cienfuegos que éste demande por millones a gobierno de EU por difamación”.
Por el otro, señaló que, en todo caso, la militarización de México comenzó cuando Felipe Calderón declaró con la conocida Guerra Contra el Narco y “abrió caja de Pandora que ni el presidente más poderoso que hemos tenido revierte y solo profundiza”.
La controversia alrededor de Cienfuegos Zepeda surgió luego de que a finales del 2020 fuera detenido en los Estados Unidos, acusado de tener nexos con miembros del Cártel H-2, un conocido brazo de los Beltrán Leyva.
El ex secretario fue apresado el 15 de octubre del 2020 y solo permaneció detenido por 33 días antes de regresar a México para ser procesado. Durante ese tiempo, el gobierno de López Obrador fue señalado por ejercer una supuesta presión a la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) sobre su participación en el país.
Las investigaciones de la DEA habrían seguido los pasos del general desde 2013, pero la administración mexicana asegura la agencia nunca compartió esa información con sus homónimos mexicanos.
Fue en el mes de noviembre cuando el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, dio a conocer que Cienfuegos regresaría a México sin cargos. “No es que aquí se le pone en libertad, no; se le pone en libertad en Nueva York” , señaló.
En aquel momento, muchas incógnitas giraban en torno al caso y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) pidió a la ciudadanía que confiaran en la investigación que se llevaría a cabo en el país.
“Quiero decirle a la ciudadanía que tenga confianza, que nosotros tenemos el compromiso de no fallarle al pueblo. Al margen de la ley, nada, por encima de la ley, nadie”, sentenció el ejecutivo el pasado 19 de noviembre.
Sin embargo, el 14 de enero, la FGR confirmó que el Departamento de Justicia de los Estados Unidos había exonerado al general Cienfuegos, pues se concluyó que “él no sostuvo encuentro ni comunicación con grupo delictivo alguno. Por lo que se determinó no ejercer acción penal”.
Por otro lado, la fiscalía asegura que el análisis de su patrimonio y obligaciones fiscales tampoco arrojó que el ex funcionario hubiera recibido recursos de manera ilegal o que su fortuna creciera de manera anormal durante el periodo señalado.
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